En el mundo de los seguros de coche, existen numerosos mitos y leyendas que a menudo confunden a los conductores al momento de contratar una póliza. A continuación, desentrañamos cuáles de estas creencias son ciertas y cuáles no tienen fundamento.
Mito: La duración del seguro es mayor que la firmada -> ¡Falso!
Uno de los mitos más peligrosos es creer que un seguro de coche, aunque figure como anual en los papeles, realmente cubre 13 meses. Esto es falso y puede tener graves consecuencias. Si la póliza se firma por 12 meses, ese es el periodo de cobertura. Aunque algunas aseguradoras pueden ofrecer un mes de gracia para el pago, esto no significa que el vehículo esté asegurado durante ese tiempo extra.
Mito: Las mujeres pagan menos que los hombres -> ¡Mito!
Antiguamente, las mujeres tenían una menor tasa de siniestralidad, lo que llevó a la creencia de que pagan menos por sus seguros. Sin embargo, hoy en día, el género ya no es un factor determinante en el cálculo del precio del seguro. Lo más importante es el comportamiento y responsabilidad del conductor, sin importar su sexo.
Mito: El seguro a todo riesgo siempre es la mejor opción -> ¡Depende!
Aunque es la opción más completa, el seguro a todo riesgo no siempre es la más adecuada, especialmente para coches más antiguos. A medida que un vehículo envejece y su valor de mercado disminuye, puede que no sea rentable mantener un seguro a todo riesgo. Es mejor adaptar la cobertura a las necesidades y características actuales del coche.
Mito: Los coches de colores llamativos pagan seguros más caros -> ¡Tranquilo!
Existe la creencia de que los coches de colores como el amarillo, naranja o rojo tienen seguros más caros, ya que suelen ser elegidos por conductores jóvenes. Sin embargo, el color del coche no influye en el precio del seguro. Las aseguradoras se basan en factores como las características del vehículo y el perfil del conductor.
Mito: Un seguro de coche incluye los extras añadidos al vehículo -> ¡No es cierto!
Si has modificado tu coche con extras, es importante declararlos en tu póliza. Los equipos adicionales deben estar especificados para que estén cubiertos. Si realizas alguna modificación, avisa a tu aseguradora para asegurar que los nuevos componentes estén protegidos.
Mito: Dar partes supone un aumento de la prima -> ¡No siempre!
Muchos temen que al reportar un siniestro, la prima aumentará automáticamente. Aunque el número de partes es una variable que las aseguradoras consideran, no es la única. Un historial de conducción responsable y sin accidentes influye más en mantener o reducir la prima de tu seguro.
Mito: Un coche de segunda mano pagará menos seguro -> ¡No necesariamente!
Es fácil pensar que un coche de segunda mano, al tener un valor menor que uno nuevo, tendrá una póliza más barata. Sin embargo, también hay que considerar que estos vehículos pueden ser más propensos a averías y tener más dificultades para encontrar recambios, lo que puede influir en el precio del seguro.
Conclusión
Como puedes ver, existen numerosos mitos y leyendas sobre los seguros de coche. Aunque algunos se basen en hechos del pasado, es esencial informarse correctamente y contactar a tu asesor de seguros para conocer los factores reales que afectan la contratación de una póliza. En Torres Asesores, estamos aquí para ayudarte a despejar dudas y ofrecerte la mejor cobertura para tu vehículo.