El estado de alarma ha causado el cese o disminución de la actividad laboral de gran cantidad de empresas y sectores laborales. No ha ocurrido así con la industria del seguro, tal y como informan distintas entidades aseguradoras, que se continúa prestando los servicios con total normalidad.
El sector asegurador comunicó su empeño en evitar la reproducción del coronavirus. Las aseguradoras de salud afirman que están favoreciendo a quienes presentan síntomas del virus el acceso a los servicios médicos.
La sanidad privada está adoptando en su totalidad las medidas de seguridad dirigidas a evitar que se produzcan contagios en el tratamiento de posibles afectados. Así también se encuentra colaborando estrechamente con la sanidad pública para lograr el objetivo común de acabar con el COVID-19.
Las aseguradoras de vida, en los casos de fallecimiento por coronavirus, están cumpliendo con las indemnizaciones correspondientes y otorgando las sumas aseguradas a sus respectivos beneficiarios.
A su vez, las pólizas de asistencia en viaje están cubriendo a aquellos que se han infectado durante un viaje asegurado. Estas atienden también a los gastos de desplazamiento, alojamiento y manutención de, al menos, un acompañante del paciente. Algunos viajes están siendo cancelados cuando el seguro comprende la cobertura de libre desistimiento.
Los demás seguros como son el de hogar, automóvil, etc. siguen igualmente ejerciendo su actividad como es habitual. Las entidades están llevando a cabo planes de contingencia para asegurar la atención al cliente en todas las líneas de negocio.