Ninguna empresa está exenta de sufrir en algún momento situaciones conflictivas, que pueden llegar a afectar a diferentes áreas, ocasionando una crisis. En estos casos contar con una póliza de D&O (del inglés Directors & Officers) resulta de gran ayuda para enfrentarla y salir airosos de ella.
Una póliza de D&O es un seguro de Responsabilidad Civil para proteger a Directores y Administradores. Este tipo de póliza cubre las indemnizaciones de las que éstos puedan ser responsables por daños ocasionados a terceros durante el ejercicio de sus funciones.
También cubren los honorarios legales para su defensa y contribuye a afrontar de la mejor manera posible las consecuencias de los errores en la toma de decisiones u omisiones que se hayan cometido, que puedan afectar a socios, empleados, competidores, etc.
Cuando la situación financiera de una empresa se ve deteriorada a causa de algún evento determinado, lo más común es que se recurra a tomar ciertas acciones para cambiar el rumbo y sobrellevar la crisis.
El reconocimiento de las pérdidas a través de la reformulación de las cuentas de forma tal que se exprese la realidad de la empresa y advertir a los socios y accionistas que no se podrá alcanzar las metas propuestas suelen formar parte de los objetivos del plan de acción.
Contribución de las pólizas D&O
Al existir una crisis empresarial, por lo general, el manejo de información no suele hacerse de la mejor manera. En este sentido las pólizas D&O pueden ser de gran ayuda ya que la gran mayoría de ellas incluyen una extensión para cubrir los gastos requeridos en estos casos.
Dentro de esos gastos se consideran los relacionados con la contratación de asesores de crisis, expertos en relaciones públicas para el manejo de las comunicaciones, tanto internas como externas, lo que contribuye a minimizar los efectos de la crisis.
No hay que olvidar que hoy en día, cualquier crisis, por pequeña que pueda ser en origen, puede llegar a alcanzar magnitudes superiores debido a internet y las redes sociales, por lo que es fundamental establecer un plan de gestión de crisis para evitar las improvisaciones.
Ahora bien, cuando la crisis es provocada por la salida de un directivo o por el contrario la salida es consecuencia de la crisis, las pólizas de D&O dan cobertura a reclamaciones que se realicen contra ellos.
Si en medio de la crisis la imagen de un directivo se ve seriamente afectada por la publicación de noticias que atenten contra su profesionalidad y llega a existir una investigación, las pólizas D&O pueden costear los gastos importantes.
Por otra parte, cabe destacar que las pólizas D&O además de proteger el patrimonio personal de los directivos y administradores de la empresa, también ofrecen coberturas que extienden sus servicios a la protección del patrimonio de la compañía.
Si bien es cierto que estas pólizas son de gran utilidad en las crisis empresariales, se utilizan con menos frecuencia de la que se debería, algunas veces por falta de información de la cobertura y otras por no contar con el asesoramiento necesario.
En ese sentido, el papel del corredor de seguros es clave para apoyar al asegurado y velar que obtenga el valor justo de su póliza.