La firma global KPMG junto a CEOE se avocaron a realizar una investigación periódica para ver cómo se va comportando la economía de España mientras atraviesa una inestabilidad tras la aparición de la pandemia de la COVID-19.

En este balance las compañías exponen las previsiones económicas, cómo son los procesos hacia la digitalización y cómo es la gestión de personas. Advierten que la recuperación de la economía no se dará antes del 2022.

 Sondeo

El informe titulado “La empresa española ante el COVID-19”  es el cuarto sondeo de las firmas de servicios profesionales, y recopila la opinión 681 directivos y empresarios españoles en un ámbito de  25 sectores económicos.

En el texto dejan claro que el  65% de los empresarios del país cree que es imperativo que el  Gobierno estimule de una forma más eficaz  la recuperación económica, y más ahora que todos se enfrentan al impacto de la pandemia.

Disminución de impuestos

Por otro lado, seis de cada 10 usuarios se inclinaron porque el Gobierno aplique una bajada de impuestos para aliviar la tensión financiera. Asimismo, el 56% considera como prioridad que se mejore la “eficacia del gasto público”.

KPMG y CEOE indicaron que en la Unión Europea una cantidad significativa de los líderes empresariales (92%) prefiere  fijar una ruta orientada hacia la “comparabilidad” económica de las compañías a nivel global; mientras que el 63% admitió estar de acuerdo con la moción.

El informe también detalló cuáles son las medidas que se necesitan aplicar para cambiar el modelo productivo:

Medidas necesarias

Con respecto a España, un 65%  de los encuestados se enfocó en la necesidad de aumentar la inversión en I+D, mientras que el 51% dijo que se debía aplicar una reforma en el  sistema educativo español.

 Ahora bien, hablando de las estrategias para incrementar la competitividad, el 58% de los encuestados indicó que debería decantarse por el aumento de la productividad, al tiempo que quienes optaron por la inversión reflejan la cifra del 42%. En este mismo orden de ideas, los líderes encuestados (45%) indicó que el enfoque debía ir hacia la formación de empleados.

Un contraste ante algunas reacciones positivas, es que el 62% de los empresarios no espera que se recuperen los niveles de facturación previos a la pandemia, y se ve el 2022 como una fecha orientativa.

No obstante, pese a que el 56% prevé una disminución en la facturación en el año siguiente (y quizás un poco más), aún se maneja un panorama positivo ante la situación actual. Luego está el resto, que dice que tendrá lugar en el mes de abril.

Volumen de ventas

Por otro lado, está el 28% de los directivos empresariales que admitió que es posible retomar el volumen de ventas para el año próximo, pero un 10% indicó que su facturación no ha sufrido cambios ante los efectos de la pandemia.

Con respecto a la reducción de personal, el 39% de los encuestados aseguró que prevé reducir el número de sus trabajadores.

Las firmas concluyeron que los meses venideros serán “claves” para el futuro de las compañías, y más para aquellas que se sumen a la transformación digital.