Con la llegada de la nueva normalidad la actividad laboral ya se ha retomado y las empresas se preparan para adaptarse a ella. La incertidumbre de afrontar una situación en la que nunca nos habíamos imaginado deja en parte a las empresas la responsabilidad de elaborar ellas mismas protocolos para la vuelta presencial al trabajo.

Ha de tenerse en cuenta que el regreso a la oficina no es obligatorio, pues es preferible que aquellas actividades laborales que se pueden llevar a cabo teletrabajando continúen desarrollándose de esta manera.

Pero para garantizar la seguridad de vuelta de los trabajadores al lugar de trabajo, tanto como la seguridad de los clientes será necesario confeccionar un plan de acción. Vamos a ver que puntos son imprescindibles en este protocolo de seguridad.

1. Modificaciones en el horario
Para respetar la distancia mínima de seguridad se deben prever las franjas horarias de más afluencia y establecer una organización donde coincidan en el mismo turno el menor número de trabajadores posible.
Es aconsejable optar por una reincorporación progresiva de la plantilla en la cual sean los primeros en hacerlo los empleados cuyas tareas no puedan desarrollarse desde casa, seguidos de aquellos cuya presencia aporte un valor extra a su actividad. Por otro lado, es recomendable descartar la presencia física de los trabajadores pertenecientes a grupos de riesgo, mientras que quiénes tengan cargas familiares su regreso ha de ser voluntario.

2. Desplazamiento al trabajo
Tal y como afirma el Ministerio de Sanidad, es preferible desplazarse en vehículos donde no coincidan otras personas. Así pues, si se escoge hacerlo con el propio vehículo de debe cuidar la desinfección de este, y, si es posible, que solo haya una persona por fila de asientos. En el transporte público la mascarilla y la distancia de seguridad son obligatorias.

3. Utilización de equipos de protección
La dirección debe adoptar las medidas necesarias para cumplir con la normativa de seguridad e higiene, llevando a cabo la desinfección de las instalaciones, disponer de geles desinfectantes y del equipo necesario de protección individual.

4. Desarrollo de medidas para cumplir los estándares de seguridad
En relación al sector laboral, se tendrán que adoptar medidas concretas para garantizar el cumplimiento las normas de seguridad, como por ejemplo el cierre de determinadas instalaciones, instalación de mamparas, para respetar la distancia de seguridad, e incluso modificar la misma actividad laboral, por ejemplo dando prioridad a las reuniones online.

5. Conciliación de la vida laboral y familiar de los empleados.
Para aquellos empleados con niños o mayores a su cargo ofrecer una incorporación progresiva,flexibilidad en el horario, conceder permisos, etc.

6. Eliminar el fichaje con huella dactilar
Sustituirlo por cualquier otro método que vele por la salud y seguridad de los trabajadores, o en su lugar comunicar a los empleados la obligatoria desinfección del dispositivo entre uso y uso.

7. Actuación ante posible contagio por coronavirus
Para evitar contagios, si un empleado tiene síntomas compatibles con el virus debe comunicarlo y abandonar el lugar de trabajo hasta que sea valorado por un médico.

8. Plazos y pre aviso
Avisar con antelación de la reincorporación al trabajo será favorable para la organización en la empresa y para el empleado.

¿Quién establecerá el protocolo?
Con la participación del departamento de recursos humanos y servicios de prevención de riesgos, es adecuado formalizar un acuerdo con el representante legal de los trabajadores o establecer un documento interno que pueda ser consultado por todos los trabajadores.